Esporangióforo de uno a diez mm de altura formado por un
diminuto pie que termina en una bolsa ovoidea que sostiene una cápsula de
esporas en forma de lenteja negra, el esporangio, el resto es completamente cristalino
y con frecuencia lleva diminutas gotas de agua condensadas. En la madurez la
bolsa subcapsular lanza por presión hidráulica la cápsula o esporangio que
contiene las esporas.
Al presionarlas entre los cristales de observación el
esporangio o cápsula negra se rompe y deja salir las esporas que contiene.
Justo debajo del esporangio presenta una vejiga o vesícula subesporangial
ovoide y llena de líquido que es la que actúa de órgano impulsor de la cápsula
de esporas o esporangio.
Aunque a simple vista o con lupa la vejiga subesporangial
parece cristalina, sin embargo se trata de un membrana pigmentada de ocráceo o
amarillo ocráceo.
Se continúa en un pie cilíndrico de la misma constitución e
igualmente pigmentado y cuya longitud puede variar de uno a varios milímetros.
Todo el esporangióforo surge de un micelio filamentoso
formado por hifas tabicadas, aunque en general las hifas de los mucorales
carecen de tabiques.
Detalle de las hifas del esporangióforo.
La parte más importante del hongo es la pequeña lenteja
oscura que presenta en el cumbre y que en realidad es un esporangio en cuyo
interior se forman las esporas.
En el interior del esporangio se forman gran cantidad de
esporas que salen por ruptura de las paredes al ser expulsadas hasta dos metros
de distancia
Las espora son elipsoidales, de paredes lisas, ocráceas y con
contenido granuloso.