Cortinarius infractus f_subhygrophanus Rob. Henry

Cortinario de porte típico de C. infractus, con láminas marrón grisáceas y sabor amargo que presenta una coloración amarillo ocrácea y claramente higrófana, de manera que en tiempo húmedo el borde aparece más oscuro y como traslúcido. VER DESCRIPCIÓN COMPLETA
Debajo del sombrero presenta láminas y lamélulas lilas o lila grisáceas y en la madurez marrón grisáceas, típicas del grupo infracti.
Sección transversal de una lámina donde se puede ver la estructura regula de la trama o carne formada por hifas bastante gruesas y dispuestas de manera paralela a las caras y apretadas con lo que confieren a éstas rigidez y flexibilidad.
Hifas de la trama de una lámina, paralelas, apretadas y con tabiques desprovistos de fíbulas.
Hacia las superficies de las caras las hifas de la trama dan lugar a células claviformes que son los basidios y basidiolos.
Los basidiolos presentan una típica forma de cachiporra con la extremidad redondeada mientras que los basidios son poco más gruesos y terminados en cuatro pedúnculos o esterigmatos donde se desarrollan las esporas.
Aunque la mayor parte de los basidios producen cuatro esterigmatos y por tanto cuatro esporas, tetraspóricos, no es raro observar algunos con solo dos, bispóricos.
Las esporas presentan una coloración ocrácea clara al microscopio, pero mucho más oscura en masa, marrón o marrón tabaco por lo que las láminas toman en la madurez una coloración marrón grisácea.
Las esporas son subglobulosas con un extremo apuntado y terminado en un apículo por donde se sujetaban al basidio y con paredes débilmente verrugosas.
Superficie del sombrero amarillo ocrácea, con fibrillas radiales y claramente higrófana, de manera que en tiempo húmedo el borde aparece más oscuro y como traslúcido. El Tl-4 da una reacción amarilla característica.
En una sección transversal de la capa superficial del sombrero se observa su estructura filamentosa en donde se aprecia un claro contraste entre las hifas más internas de la trama, muy gruesas, y las superficiales, arriba de la foto, mucho más finas y apretadas y pigmentadas lo que es responsable de la higrofaneidad.
La capa de hifas superficiales finas y apretadas forman una barrera importante, lo que le da impermeabilidad. En la foto numerosas esporas adheridas a la superficie.
La carne o trama está constituida por hifas gruesas, ligeramente estranguladas en los tabiques y dispuestas hacia la superficie de manera paralela lo que da consistencia al sombrero.
Sin embargo las hifas superficiales son mucho más finas e impermeabilizan más, pero con la desecación se deshidratan antes y sale la coloración de las hifas más internas gruesas, de ahí el cambio brusco de la coloración, la higrofaneidad.
Superficie del pie lisa, al principio, blanquecina y recubierta de finos hilos restos de cortina que con la edad se tiñen de marrón por las esporas.
Vista frontal de la superficie del pie formado por hifas filamentosas, paralelas y apretadas sobre las cuales vemos zonas más oscuras que corresponden a agrupaciones de hifas sueltas, la cortina, sobre las que se adhieren esporas.
Detalle de las hifas que forman el pie, paralelas y apretadas lo que da lugar a un pie fibroso y consistente.

De las hifas superficiales se desprenden algunas hifas que inicialmente se unían al borde del sombrero formando una cortina protectora del himenio, al abrirse quedan sobre la superficie del sombrero, atrapan numerosas esporas y se deterioran por desecación con bastante facilidad.