Xylodon asperus (Fr.) Hjortstam & Ryvarden

 

Hongo que desarrolla sobre ramas de pino, en forma de una fina película blanca con diminutos dientes o incluso retículo en los bordes, con esporas elipsoidales y terminaciones de hifas a modo de cistidios terminados en una pequeña cabeza esférica. VER DESCRIPCIÓN COMPLETA.

La superficie fértil o himenio ocupa toda la superficie expuesta del carpóforo, blanca y muy delicada, aparentemente lisa, pero observada a la lupa se aprecian pequeños dientes o incluso hacia los bordes pueden llegar a formar como poros o un fino retículo.


Trama del carpóforo monomítica, formada por un solo tipo de hifas, hifas generativas, lo que le confiere una consistencia muy tierna que se separa muy fácilmente del sustrato.

Hifas generativas muy finas, ramificadas, entremezcladas, de paredes lisas y delgadas y con tabiques provistos de gruesas fíbulas.



Hacia la superficie las hifas terminan en células diferenciadas más o menos perpendiculares a la superficie que son los basidios y los basidios. Los basidios son cilíndricos o muy progresivamente ensanchados hacia la extremidad, relativamente alargados y terminados y cuatro finos pedúnculos, los esterigmatos, en cuya extremidad se forman las esporas, tetraspóricos, en nuestras muestras de 17.6 [20.3 ; 27.7] 30.4 x 3.3 [3.6 ; 4.6] 5 micras.

Entre los basidios y basidiolos emergen numerosas hifas que le dan ese aspecto afelpado o pulverulento a la superficie, muchas de ellas con incrustaciones cristalíferas.

En las zonas más elevadas, a nivel de los aguijones, las terminaciones de hifas que emergen y sobresalen son más numerosas y los basidios y basidiolos más escasos, además de las hifas cristalíferas emergen otras terminaciones, más o menos flexuosas y con la extremidad ensanchada, capitada, a modo de cistidios.



En algunas muestras las terminaciones son más netamente capitadas, con una pequeña cabeza redondeada y aspecto más claramente de cistidio.


En toda la superficie se producen numerosas esporas elipsoidales, cortas, de paredes lisas y con una gruesa vacuola en su interior, muy poco congófilas, de, 4.8 [5.3 ; 5.5] 5.9 x 3.9 [4.2 ; 4.3] 4.6 micras.


Observadas en Melzer aparecen amarillentas por el yodo pero no se tornan grisáceas por la ausencia de almidón en las paredes celulares, esporas inamiloides.